La leyenda de Castiliscar:

Érase una vez, en un pueblo llamado Castiliscar, un pueblo sencillo, muy religioso, y muy común.

Llego una familia de ciudad, cuando llegaron eran conocidos por la gente del pueblo como los” forasteros”.

La familia estaba formada por el padre llamado Lucas, la madre llamada María, y un hijo de 8 años llamado Oscar.

A Oscar le gustaba mucho el futbol, y todos los días, jugaba a la pelota en la calle de atrás de su casa. Cerca de su estaba el cementerio.

Un día Oscar estaba jugando al  futbol, después de cenar y de repente la pelota paso la vaya del cementerio.

Oscar se metió dentro del cementerio, y cuando estaba acercándose a por la pelota, se empezó a oír voces, Oscar se asusto mucho y salio corriendo.

A la mañana siguiente, un grupo de agricultores situados en plaza mayor, empezaron a promulgar por todo el pueblo que por las noches en ese cementerio se escuchaban las voces de los muertos, ya que ese mismo día por la noche los habían escuchado.

Este tema estuvo en boca de todos durante varias décadas.

Un día unos montañeros llegaron a Castiliscar por la noche, pasaron por enfrente del cementerio, y escucharon las populares voces. Alarmados fueron corriendo a la iglesia, donde estaba el arzobispo preparando la misa del día siguiente, cuando los montañeros le dijeron lo que había ocurrido, el arzobispo se asusto, porque esa era la popular leyenda de Castiliscar.

Todo el pueblo se entero de lo ocurrido, y también se acercaron a la iglesia, todo el pueblo dijo al arzobispo que tenían que ir a descubrir que era eso.

Cuando partieron hacia allí, todo el mundo estaba muy asustado, pensando en que podría pasar…

Una vez allí dentro se volvieron a escuchar esas voces, la gente estaba asustada, muchos lloraban de miedo, cuando de repente un chico con mucha valentía se adentro en el cementerio, sin temor, al rato vino corriendo, y dijo: -venid venid venid todos a ver esto.

Cuando el chico les llevo al centro del cementerio, donde salían proceder las voces, de una pequeña casita, allí situada, en el centro del cementerio, cuando todo el mundo puedo ver, que las voces que salían de esa casa, no era mas que la radio del guardia nocturno, que vigila el cementerio, pero que en realidad siempre se dormía con la radio puesta.

Después de ver esto todo el mundo se quedo, diciendo, como hemos podido temor a eso…

Quedo claro que la popular leyenda de Castiliscar, no era mas que un simple mal entendido.